Se sabía que Belgrano debía hacer una buena campaña para emparejar aquellos pobre números que terminó cerrando en 2017.

Sin embargo, fueron los propios 25 partidos de la reciente Superliga los que lo depositan, nuevamente, en la Primera B Nacional.

El camino que arrancó Lucas Bernardi con aquel 0 a 0 ante San Martín de San Juan en Alberdi, en agosto pasado, nunca se enderezó. El entrenador se fue en la fecha 8, con 7 puntos en la tabla y un 0-3 en el clásico ante Talleres.

A la única victoria de aquel ciclo (2-0 a Estudiantes), tampoco le siguieron muchos festejos con Diego Osella en el banco.

De los 17 que dirigió, sólo le ganó a Gimnasia de La Plata (2-0) y este año a Patronato (3-0), ilusión mediante.

Todos los festejos fueron en Alberdi. El mismo estadio "Julio César Villagra" que, casi repleto, vivió el desilucionante 0-0 ante Godoy Cruz.

Fue la despedida de la Superliga.

El "Pirata" terminó con 24 puntos en los 25 encuentros que disputó.

En la otra temporada "pesada", entre 2016 y 2017, contó 26 unidades en 30 juegos. Números muy similares.

Ahora, con un proyecto institucional que se fue consolidando, el fútbol profesional se las debe ver, nuevamente, en el ascenso.