Una adolescente de 14 años que estaba desaparecida desde el domingo a la mañana fue hallada asesinada en una casa de la localidad bonaerense de Francisco Álvarez, partido de Moreno en la provincia de Buenos Aires, adonde había ido a una fiesta.

Como principal sospechoso del femicidio buscan a un joven de 19 que se escapó de la puerta de la comisaría antes de declarar, informaron hoy fuentes policiales y judiciales.

La víctima fue identificada como Ludmila Pretti y decenas de familiares, amigos y conocidos, realizaron durante la tarde una marcha frente a la comisaría 6ta de Moreno, en reclamo de Justicia y de la detención del presunto autor del femicidio.

Familiares y amigos protestando frente a la comisaría. Foto: Juan Manuel Foglia.
Familiares y amigos protestando frente a la comisaría. Foto: Juan Manuel Foglia.

La autopsia practicada en la tarde de este lunes confirmó que Ludmila murió por asfixia por estrangulamiento a lazo.

Investigadores agregaron que se esperan estudios complementarios para saber si hubo o no un abuso sexual y que la data de muerte es entre las 8 y las 12 del domingo.

"La hipótesis es que a la chica la intentaron abusar, que ella se resistió y la ahorcaron. Para corroborarlo, esperamos los resultados de la autopsia", dijo a Télam una fuente judicial.

Todo se inició ayer cuando la familia de Ludmila advirtió que no había regresado a su casa, también en Francisco Álvarez, luego de haber asistido la noche del sábado a una reunión con amigos.

Según lo que pudieron reconstruir los investigadores, Ludmila había ido con un amigo y una amiga a la casa de un primo de ésta última, un joven de 19 años identificado como Cristian Adrián Jerez, quien ahora es el principal sospechoso del crimen y está prófugo.

Si bien se creía que a las 7.30 de ayer la adolescente había salido para dirigirse a su domicilio, un tío policía de Ludmila logró con una aplicación geolocalizar el celular de la víctima, que seguía indicando como destino la casa de la fiesta.

Fuentes de la investigación indicaron a Télam que durante la tarde de ayer, el propio sospechoso estuvo en contacto con la familia de la adolescente, le manifestó que la chica se había retirado sola y se mostró preocupado por su desaparición, pero luego se fugó antes de declarar en la comisaría.

“El que se fugó, estuvo hablando conmigo, me vio a la cara, dijo que iba a buscar el documento y no volvió nunca más, no lo tendrían que haber dejado salir”, afirmó Leandro, el padre de Ludmila, al portal de noticias locales Semanario Actualidad.

Durante la noche del domingo el fiscal de la causa, Federico Soñora, de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 4 de Moreno, ordenó un allanamiento de urgencia en la vivienda de la calle Diario La Nación y allí se encontró el cadáver de Ludmila debajo de la cama, entre dos colchones.

Cuando se hizo el allanamiento, Jerez, el principal sospechoso e inquilino de la vivienda donde fue hallada asesinada Ludmila, ya no pudo ser ubicado.

Tras el hallazgo del cadáver, el fiscal obtuvo el testimonio clave de una vecina de Jerez, que habita otra vivienda en el mismo predio, quien relató a los investigadores que alrededor de las 7 de ayer escuchó gritos y una discusión entre Ludmila y el sospechoso, en la que la chica se quería ir y el joven no la dejaba.

La familia de la víctima también denunció que luego de la fuga, Jerez subió “un estado” a una de sus redes sociales que lo ubicaba en la localidad bonaerense de Gregorio de Laferrere, partido de La Matanza.

“En esa zona vive una de la hermana del sospechoso, ya se fue a chequear ese domicilio, pero no lo ubicamos”, confió a Télam una de las fuentes consultadas.
 

Fuente: Télam