Rige en el país un nuevo Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) para frenar la escalada de casos positivos de Covid-19. Sin embargo, desde el Gobierno Nacional ya piensan en qué medidas se tomarán luego del 30 de mayo.

Es cierto que se vienen tres meses complicados, debido a la llegada del invierno, y el antecedente europeo es el comprobante de ello. Por esto, según informa Pablo Ibáñez en elDiarioAr, podría aplicarse un "confinamiento intermitente".

Este recurso implica transitar períodos de fase 2 y otros, más breves, de fase 1. Algo de esto adelantó la ministra de Salud, Carla Vizzotti, este sábado cuando habló de posibles "cierres intermitentes".

La otra opción es llevar a cabo un modelo matemático desarrollado por científicos del Instituto Weizmann de Israel. La estrategia propone un aislamiento intermitente fijo: cinco días de confinamiento y dos días de trabajo por semana.

Este recurso permitiría reducir el número de replicación del virus ya que, por cada persona infectada, el índice de contagio a otra caería por debajo de uno. Según los expertos, incluso sería mejor un aislamiento de diez días por cuatro de trabajo.

En nuestro país, este modelo sería aplicado de otra manera: en el Gobierno barajan un "mix" de cinco días en fase 2 y dos días en fase 1. De esta manera se podrían llevar a cabo la mayoría de las actividades económicas aunque se perjudicarían la actividad gastronómica y de esparcimiento.

Sin embargo, como refuerza Ibáñez, es importante -y en Casa Rosada lo saben- que estas medidas estén acompañadas de controles efectivos en todo el país. En ese aspecto, el presidente Alberto Fernández depende de los gobiernos provinciales y municipales.

Con información de Funds Society