El presidente Alberto Fernández aseguró esta mañana que "devaluar es fácil, pero es una máquina de generar pobreza", y advirtió que se trata de algo contrario a su objetivo.

Al encabezar en Ezeiza un acto de entrega de viviendas para familias de las provincias de Buenos Aires y Río Negro, aseguró que quiere una "Argentina que crezca y se desarrolle, que de trabajo, produzca y exporte".

El mandatario argentino descartó una devaluación del peso y dijo que las divisas se deben conseguir trabajando, produciendo y exportando y “no porque pusimos el dólar al precio que algunos poderosos necesitan”.

"No llegamos al Gobierno para cruzar los brazos ni para obedecer, sino que llegamos para obedecer a quienes nos votaron”, advirtió el Presidente.

Durante el mensaje recordó que, durante la gestión de Cambiemos, hubo "11.000 viviendas" que "estaban terminadas" y "no fueron entregadas", al igual que sucedió con hospitales en la provincia de Buenos Aires y dejó en claro que la responsabilidad de esta situación "siempre" es de los que gobiernan y no de la gente.

El mandatario estuvo acompañado por el gobernador de Buenos Aires, Axel Kicillof; la ministra de Desarrollo Territorial y Hábitat, María Eugenia Bielsa; la directora ejecutiva de Anses, Fernanda Raverta; y el intendente de Ezeiza, Alejandro Granados.

Desde allí se pusieron en contacto con los gobernadores de Río Negro, Arabela Carreras; La Rioja, Ricardo Quintela; y Formosa, Gildo Insfrán; y el intendente de Florencio Varela, Andrés Watson.