El presidente Alberto Fernández se encuentra en Los Ángeles, Estados Unidos, donde se lleva a cabo la IX Cumbre de las Américas. Allí brindó este jueves un discurso donde trató varios temas, entre ellos la importancia de una Latinoamérica unida.

Cabe recordar que el presidente es titular pro témpore de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac). En poco más de 10 minutos, aprovechó también para criticar la ausencia de Cuba, Venezuela y Nicaragua.

En el comienzo, Fernández repasó la desigualdad que se vive en el continente y culpó al orden global que impone "reglas financieras inequitativas". "Pocos concentran el ingreso mientras millones quedan atrapados en el pozo de la pobreza", expresó.

Tras esto, remarcó el papel que ocupan América Latina y el Caribe y la importancia de que se trabaje en conjunto. "Quisiera dejar sentado que el hecho de ser país anfitrión no otorga la capacidad de imponer el derecho de admisión sobre los países miembros del continente", señaló, en alusión a Estados Unidos.

Luego, Fernández repasó la gestión de Donald Trump (que consideró dañina para la región) y le solicitó a Joe Biden que cambie el rumbo. También lamentó que el país del norte se haya apropiado de la conducción del Banco Interamericano de Desarrollo.

Una de las propuestas que expuso fue la de cambiar la Organización de los Estados Americanos (OEA): "Si quiere ser respetada debe ser reestructurada removiendo a quienes la conducen"

En otro momento, propuso que se organice continentalmente la producción de alimentos y proteínas y que se aproveche el "enorme potencial" que la región tiene en materia energética. 

"Nos resulta natural pensar en la construcción de un futuro sostenible. Estoy tratando de construir puentes y derribar muros", dijo el jefe de Estado. Allí aprovechó para invitar a Biden al próximo plenario que celebre la Celac.