El presidente Alberto Fernández se refirió a las protestas que realiza en los últimos días la policía bonaerense en reclamo de incremento de salarios.

En una recorrida por la fábrica de la cervecera Quilmes, que anunció inversiones por 50 millones de dólares, el primer mandatario advirtió que los reclamos "no se resuelven tocando sirenas", sino "frontalmente", y reivindicó la vocación de su Gobierno y de la gestión bonaerense de Axel Kicillof para "resolver los problemas".

"Nadie escapa a lo que nos está pasando. Decía Camus en La Peste que las pandemias dejan al descubierto las miserias de algunas almas. No es ético aprovechar la pandemia para profundizar la crisis y reclamar cosas que en este momento no se pueden hacer. Los conflictos no se resuelven andando en patrullero y tocando bocina", remarcó.

Y reiteró: "Eso no se resuelve escondido en patrulleros tocando sirenas sino hablando frontalmente y el Gobierno nacional y el gobernador van a afrontar este problema y no se va a hacer el distraído", dijo.

En este contexto, el mandatario agregó que el Gobierno "reivindica mucho las necesidades de la provincia de Buenos Aires, que desde que cedió puntos de coparticipación federal empezó a ver cómo bajaban esos puntos y subía la cantidad de habitantes".

Inversiones

El presidente Alberto Fernández destacó que existan empresas que "sigan apostando a los argentinos", a la industrialización y a la "producción no contaminante", aún en tiempos difíciles, como el que vive el mundo por la pandemia de coronavirus.

En declaraciones durante su visita a la Cervecería y Maltería Quilmes, el mandatario también recordó que Argentina transita la difícil situación generada por la pandemia "cargando una mochila que pesa mucho", ya que los problemas ya existían cuando asumió el gobierno, el 10 de diciembre último.

"Que no nos confundan, estamos levantándonos de un tiempo difícil, cargando una mochila que pesa mucho", advirtió, al tiempo que celebró la inversión anunciada por la empresa Quilmes, de 50 millones de dólares destinados a la producción local.

Tras su recorrida por la fábrica ubicada en la localidad bonaerense de Quilmes, Alberto Fernández, también descubrió que "todas las cervezas y gaseosas" que toma "son de Quilmes", en lo que fue un elogio a la tradicional marca.

"Acá se siguió trabajando en la pandemia, se cuidó a la gente, se siguió creciendo, se sigue invirtiendo e innovando, ésta es la Argentina que existe", agregó el Jefe de Estado en referencia a la actividad que realiza la planta, aún en el contexto de pandemia, con los protocolos correspondientes para cuidar a sus empleados.

"Somos un gobierno muy convencido de lo que venimos a hacer: vinimos a hacer dos cosas: a producir y dar trabajo", agregó.

Agregó: "Les pido ante las voces apocalípticas, que dicen que no vamos a ningún lado; dense cuenta todo lo que hicimos".

El Presidente estuvo acompañado por el gobernador bonaerense, Axel Kicillof; el ministro de Desarrollo Productivo, Matías Kulfas; la intendenta de Quilmes, Mayra Mendoza; el presidente de Quilmes, Martín Ticinese, y la secretaria de Comercio Interior, Paula Español.