Este martes, el presidente Alberto Fernández brindó su primer discurso ante la Asamblea General de las Naciones Unidas (ONU). Allí reivindicó el diálogo y la cooperación entre las naciones para superar la crisis sanitaria y social global que deja la pandemia.

“No es tiempo de globalizar la indiferencia sino de globalizar la solidaridad en múltiples dimensiones”, expresó el mandatario. La sesión se realizó de manera virtual debido al contexto sanitario. 

“Si estamos uniendo esfuerzos de médicos, investigadores, inversionistas y sistemas científicos de todo el planeta para descubrir una vacuna que prevenga el Covid-19, tenemos que ser capaces de soñar y construir una vacuna contra la injusticia social, la depredación ambiental y la discriminación en todas sus formas”, señaló Fernández. 

En ese marco, el presidente también remarco la importancia de que la vacuna sea un "bien público global accesible a todas las naciones de una manera equitativa”. Y se refirió al Acuerdo de París en materia Ambiental: “Nadie se salva solo en un planeta que se incendia, se inunda o se envenena”.

Por otro lado, Fernández hizo referencia a la deuda externa y agradeció el apoyo que recibió el país durante las negociaciones. Además, elogió el posicionamiento de la ONU sobre los Procesos de Reestructuración de la Deuda Soberana, expuesto en su Resolución 69/319 del año 2015.

“Sentó un precedente para el reconocimiento de los derechos económicos soberanos frente a comportamientos abusivos y extorsivos”, dijo, y enfatizó: “Ningún país puede pagar su deuda a costa de que su pueblo quede sin salud, sin educación, sin seguridad o sin capacidad de crecer”.

Por último, Albero Fernández tocó el tema del reclamo por las "Islas Malvinas, Georgias del Sur, Sandwich del Sur y los espacios marítimos circundantes”. Este año se cumplirán 55 años de la Resolución 2065, la primera adoptada por la ONU relativa a la Cuestión de las Islas Malvinas y por la cual solicitó a la Argentina y al Reino Unido mantener negociaciones que permitiesen alcanzar una solución pacífica y definitiva a la disputa de soberanía.

"El Reino Unido persiste en su actitud de desoír el llamado a reanudar las negociaciones respecto de la disputa territorial y ha agravado la controversia por los llamados a la explotación ilegal y unilateral de los recursos naturales renovables y no renovables en el área”, repudió Fernández.  

“Hemos solicitado al Secretario General que renueve sus esfuerzos en la misión de buenos oficios que le fuera encomendada por esta organización. Confiamos en que puede ser de gran asistencia para que podamos dar cumplimiento a lo dispuesto por la comunidad internacional”, informó.