Este lunes, el jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, y el gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, se reunieron para analizar las flexibilizaciones de la cuarentena en ambos distritos. 

Se trató de un encuentro privado en la sede de la jefatura porteña para analizar los resultados de la cuarentena dura y las proyecciones epidemiológicas para definir los criterios del proceso gradual de actividades que comenzará, casi con seguridad, el 18 de julio.

Desde esa fecha se podría encarar una apertura coordinada y diferenciada de algunos sectores de la economía, así como para autorizar nuevas actividades de recreación.

Ayer domingo, el reporte oficial del Ministerio de Salud registró de todos modos una baja considerable en los nuevos contagios, tanto en la Ciudad como en la Provincia: 754 y 1.633, respectivamente. Y una ocupación del 59.5% de las camas de terapia intensiva en el AMBA, una de las variables que más preocupa a las autoridades políticas y sanitarias.