La mentada veda electoral se extiende desde este viernes y hasta la noche del domingo, aunque con sus particularidades.

Surgida como sinónimo de “reflexión”, para que la ciudadanía pueda emitir su voto sin “el ruido” que producen actos proselitistas y propagandas políticas.

Lo cierto es que en los tiempos que corren, la falta de regulación sobre internet le genera un efecto contrario. Allí la difusión de anuncios de parte de los partidos políticos no está prohibida.

En rigor, desde este viernes y hasta el domingo, se impide que haya actos proselitistas públicos, que se publiquen encuestas y sondeos y, hasta las 21:00 del día del comicio, se impide dar a conocer resultados a través de medios masivos de comunicación.

Desde las 20:00 del sábado, a su vez, se impide la venta de bebidas alcohólicas por parte de comercios y no se permite portar banderas distintivas de los partidos intervinientes.

Desfasaje mediante, tampoco se permite portar armas.

Entre las 8:00 y las 18:00 del domingo, horario en el que está habilitado el derecho a voto, no se pueden realizar espectáculos artísticos, deportivos ni gastronómicos; ni reuniones públicas fuera del acto electoral.

Hasta un radio de ochenta metros de un colegio donde se vote, también la ley prohibe expresamente “la realización de reuniones de electores en los domicilios, la utilización de las viviendas como depósito de armas y la apertura de organismos partidarios”.