En el marco de la presentación de una nueva estrategia de seguridad nacional que incluye un aumento del 45% de su arsenal nuclear, el Reino Unido incluyó a las Islas Malvinas entre los lugares en los que adelantó que no hará concesiones.

“Reino Unido usará la fuerza para defender su presencia en las Islas Malvinas”, advirtió el gobierno del primer ministro Boris Johnson de acuerdo a un texto sobre una nueva estrategia de defensa y seguridad que se presentó este martes ante el Parlamento, y que también incluye el incremento de su arsenal nuclear.

La estrategia del gobierno establece información sobre las diversas formas en que Reino Unido protegerá sus 14 territorios de ultramar "disuadiendo y defendiéndose de amenazas estatales y no estatales", indica el informe para describir el accionar en los lugares ocupados entre los que se incluyen las Islas Malvinas Argentinas.

El plan de Boris Johnson establece que las Fuerzas Armadas deben "mantener una presencia permanente en las Islas Malvinas, la Isla Ascensión y el Territorio Británico del Océano Índico".

"Reino Unido está lejos de abandonar sus compromisos trasatlánticos", le dijo una fuente del Gobierno británico al diario The Daily Express.

El programa de seguridad y política exterior fue diseñado por Johnson como parte de su estrategia para colocar a Reino Unido en el centro del escenario mundial en la era post-Brexit y coincide con los esfuerzos del gobierno argentino por relanzar con fuerza el reclamo de soberanía sobre las Islas Malvinas.

Reino Unido decidió, además, ampliar su arsenal de armas nucleares por primera vez desde la caída de la Unión Soviética en 1991, según esta revisión estratégica, que sitúa a Rusia, y en menor medida a China, como amenazas.

El gobierno de Boris Johnson elevará el techo máximo de su arsenal de ojivas nucleares de 180 a 260, lo que supone un aumento de casi 45%, según la revisión que presentará el primer ministro conservador ante el parlamento durante el día.

Reino Unido pondrá así fin al desarme progresivo emprendido tras la caída de la Unión Soviética en 1991, invocando una "panoplia creciente de amenazas tecnológicas y doctrinales" para justificar este cambio, sin precedentes desde el fin de la Guerra Fría, informó la prensa.

El grupo Campaign for Nuclear Disarmament (CND) ve en esta iniciativa un "primer paso hacia una nueva carrera armamentista nuclear" y la tachó de "enorme provocación en el escenario mundial".

"Mientras el mundo se debate con la pandemia de coronavirus y el caos climático, es increíble que nuestro gobierno elija aumentar el arsenal nuclear británico", subrayó su secretaria general, Kate Hudson.

Fuente: ambito.com / thelondoneconomics.co.uk / express.co.uk