Las empresas de transporte interurbano anunciaron que no reducirán los servicios por lo menos hasta el miércoles cuando se reúnan con las autoridades provinciales.

La quita de subsidios a empresas del transporte interurbano de Córdoba, además de quedar afuera de los aportes del gobierno provincial, hace angustiante la situación para quienes prestan servicio fuera de “el área metropolitana”, es decir, más allá de sesenta kilómetros de la capital.

Estas condiciones llevan a que el gasoil, por caso, se pague un 230 por ciento más caro que en los últimos días de 2018.

Este mediodía representantes de las firmas nucleadas tanto en FETAP como en Asetac decidieron suspender la reducción de servicios que iba a regir entre las diez de la noche y las seis de la mañana.

Desde la Provincia, escuetamente confirmaron una reunión prevista con las partes para el miércoles, casi la imposibilidad de brindar aportes económicos y el trabajo para evitar conflictos mayores.