"Todos estamos preocupados por lo que pasa en Bolivia”, dijo el presidente Mauricio Macri en lo que fue la primera expresión del jefe de Estado sobre la salida del poder de Evo Morales en el país vecino.

La administración de Cambiemos mantiene la posición de no hablar de golpe de Estado después que las Fuerzas Armadas le hayan pedido la renuncia al Presidente boliviano.

Tras la reunión de gabinete ampliado, que se realizó este lunes en la Casa Rosada, el canciller Jorge Faurie expresó la posición oficial al decir: "las Fuerzas Armadas no han asumido el poder".

La crisis boliviana fue motivo de discusiones entre Macri y el presidente electo Alberto Fernández a menos de un mes de su asunción. El exjefe de Gabinete le propuso al actual mandatario que dieran un comunicado conjunto pero se encontró con la negativa del jefe de Cambiemos que se negó a denunciar un golpe de Estado.

Asimismo dirigentes de la Unión Cívica Radical como Raúl Negro y Martín Lusteau se diferenciaron de Macri al condenar el golpe.