Ingresando al centro de la ciudad de Córdoba, viniendo desde el este, se visibiliza ya la estructura de la nueva sede de la Legislatura Unicameral, que construye el Gobierno frente al predio donde se encuentra el Panal, el espacio del Poder Ejecutivo.

Allí, días atrás falleció el operario Ramón Paniagua, quien fue tapado por un alud de tierra después de un desmoronamiento y perdió la vida. Realizaba tareas de plomería y la responsabilidad por falta de seguridad a la empresa contratista no tardó en llegar, ni la eximirá de responsabilidades.

Este lunes, después de una pormenorizada inspección, se resolvió que la obra continúe detenida.

“Hay falencias en el núcleo grande de dónde va a funcionar la Legislatura, y faltan cosas que podrían traer peligro a los trabajadores. Faltaba también alguna documentación en lo que hace a la seguridad. Falta marcación y señalización, que es muy importante. Los encargados de seguridad tienen que estar permantes ahí, porque la obra es dinámica. Creo que hubo una irresponsabilidad”, denunció este martes Néstor Chavarría, de la Unión de Obreros de la Construcción de la República Argentina (UOCRA) seccional Córdoba.

En diálogo con radio Universidad, adujo que “en la medida que no estén estas cosas”, no aceptarán seguir con las tareas.

Sobre la tragedia del obrero, ocurrida en la obra colateral al edificio, dijo que “no se hizo ahí un talud para que el desmoronamiento sea más lento”, además de que “no se hizo un estacado, un tablonado a la orilla” que hubiera ayudado.

Chavarría agregó: “No nos olvidemos que estamos trabajando cerca del río, donde la tierra se desmorona fácilmente, es arenosa, y eso es peligroso. Todas estas cosas no se pusieron en funcionamiento y hoy nos lamentamos”.

Para el dirigente, “faltan asegurar bandejas de contención en los pisos, marcación y señalización”.