La delicada situación de la dirigente de la agrupación Tupac Amaru de Jujuy, Milagro Sala, tiene un nuevo capítulo, después de que este lunes se conociera su condena a trece años de prisión.

La causa en cuestión es la denominada ‘Pibes Villeros’, parte central de las acusaciones judiciales que, desde su lugar, encabezó el gobernador Gerardo Morales.

Más allá de cuestionar el fallo, desmentir las acusaciones y referir una gran parcialidad en el Poder Judicial de la provincia, Sala apelará el dictamen.

Su abogada, Elizabeth Gómez Alcorta, trajo a colación la cuestión legal por la que denuncia una maniobra conjunta para que la condena se conozca estos días.

“Milagro cumple este miércoles tres años con prisión preventiva. Y ese es el plazo máximo estipulado para permanecer en esa condición sin una condena que la justifique”, dijo.