Varios son los periodistas extranjeros que cubren el Golpe de Estado, las protestas y las represiones en Bolivia. Uno de ellos es Fernando Ortega Zabala (Fernando Oz, en Twitter), en representación del medio Puente Aéreo Digital.

Durante la jornada del martes de ataque militar en la zona de El Alto, Ortega Zabala, que llegó a ese país hace 3 días, desempeñaba sus tareas en el lugar.

Por medio de su cuenta de Twitter, el periodista detalló un relato estremecedor que lo replicó en diálogo con Nada del Otro Mundo, por FM 102.3.

“Ayer vi 10 muertos de los cuales 4 de ellos murieron adelante mío. La represión, realmente, fue terrible. Al mediodía, helicópteros tiraban gases lacrimógenos, después la policía y el Ejército disparaban a mansalva, de hecho me dispararon en dos oportunidades, los impactos pegaron a un metro de distancia mía”, comenzó contando al medio universitario.

Sobre las personas heridas, dijo, “perdí la cuenta, pero de los muertos no me lo olvido mas. El número de muertos es incierto. Hay algunos que hablan de 28 o 30 y algunos desaparecidos”.

Ortega Zabala fue refugiado junto a otro periodista de México por vecinos de la zona. “La gente de aquí nos dijeron que la policía nos estaba buscando. No sabemos si es cierto o no pero por las dudas tomamos las precauciones porque nos pueden declarar en sedición. Nos dieron alojamiento en un lugar, con colchones en el piso, tuvimos mucho frío”, detalló.

Con esta declaración, el periodista rechaza los datos de la Defensoría del Pueblo de Bolivia quienes habían informado que en esa jornada de represión hubo un saldo de 6 personas muertas. “Diez cadáveres ví yo, no me lo contó nadie. Es una gran mentira lo que están diciendo. Y no se cuántas habrán visto otras personas en Senkata. Que digan eso es una barbaridad”, expresó.

El periodista negó haber visto personas armadas enfrentando la represión: “Voy a ser honesto. Yo no vi a nadie armado. También dicen que tenían dinamita, yo no vi a nadie con dinamita”.

Aclaró también el motivo de su viaje a Bolivia: “Yo no soy político, no milito en ningún lado, yo solo vine acá a informar lo que podía ver y lo que podía averiguar (…) Llegué hace 3 días y desde que llegué lo único que veo acá es violencia”.

“Anoche, mientras intentaba dormir, lo que más me recriminaba a mí mismo era no conocer los nombres de las cuatro personas que vi morir”, declaró conmocionado.

Desde la Cancillería Argentina en Bolivia aun no le han brindado las garantías ni la seguridad para que su vida esté a resguardo.