Fue el propio Gerardo Morales quien anticipó que la niña de 12 años, embarazada de 23 semanas producto de una violación, finalmente podrá acceder a la práctica de una "interrupción legal", que el Código Penal argentino permite desde 1921.

El hecho ocurrió en la localidad de San Pedro, Jujuy, con una situación delictiva de parte de un vecino, de unos sesenta años, que la víctima resolvió esconder hasta que fuertes dolores abdominales la llevaron a un nosocomio local.

Controversias judiciales, la intervención de la diputada nacional Alcira Burgos y hasta la negativa de personal médico demoraron la cuestión, que se enmarca en las situaciones que prevé la ley para interrumpir un embarazo.

“El jefe del servicio salía a decir que se oponía a esta situación. Nosotros hemos venido trabajando con distintos grupos interdisciplinarios y está en riesgo la salud de una niña de 12 años. De modo tal que la orden que he impartido es que en lo inmediato se proceda a interrumpir ese embarazo y cumplamos con el fallo de la Corte y nuestra legislación nacional”, graficó este miércoles el mandatario provincial.

La cuestión central de críticas gira en torno a que se realice una cesárea, en contra de lo que afirman protocolos de salud, que recomiendan el aborto.

JUJUY. |. EL GOBERNADOR APROBÓ EL PROTOCOLO I.L.E.