Por un error interno, la empresa Farma-Química Sur comercializó como omeprazol lo que en realidad era minoxidil, un potente vasodilatador cuyo uso más conocido es el tratamiento de la alopecia (caída del cabello). Esta es la causa del brote de hipertricosis que afectó hasta el momento a 17 bebés en España, según confirmaron fuentes de la Agencia Española del Medicamento y Productos Sanitarios (Aemps).

La dolencia se caracteriza por un crecimiento desmesurado del pelo por todo el cuerpo, por lo que también es conocida como síndrome de hombre lobo. La Aemps, dependiente del Ministerio de Sanidad, tuvo conocimiento ayer de un nuevo caso, diagnosticado en la provincia de Granada. En total hay 10 bebés afectados en Cantabria, cuatro en Andalucía y tres en la Comunidad Valenciana.

“A mi hijo se le llenó de pelo la frente, los mofletes, los brazos y piernas, las manos... Tenía las cejas de un adulto. Daba mucho miedo porque no sabíamos lo que le estaba pasando”, recuerda la madre de uno de los afectados que tenía seis meses cuando los cambios alarmaron a sus progenitores. Otra madre de la misma provincia recuerda el “angustioso ir de un médico a otro” cuando su hijo, de solo tres meses, empezó a sufrir el mismo problema. “Fuimos al pediatra y nos dijo que podía ser algo genético o metabólico. Tuvimos que empezar a ir a especialistas para descartar varios síndromes y afecciones rarísimas”, relata.

Las investigaciones llevaron a poner el foco en los jarabes contra el reflujo gástrico que fueron preparados como fórmulas magistrales por algunas farmacias. Esto permitió llegar hasta la fábrica que Farma-Química Sur tiene en Málaga, a la que la Aemps envió sus inspectores.

Se analizó el lote original de omeprazol a granel procedente de la India y los resultados mostraron que estaba en perfecto estado. El problema estuvo en el fraccionamiento en lotes más pequeños ya que hubo una grave confusión en el proceso.

La fábrica permanece hoy clausurada por los “graves incumplimientos detectados en las normas de control de fabricación de medicamentos”, según las fuentes.

Las familias afectadas están indignadas con lo ocurrido. “Mi hijo tomó dos frascos y medio, hasta que el médico me avisó”, denuncia Selles. “Le han hecho varias pruebas y por ahora lo único que ha salido un poco mal es el hígado, pero nos han dicho que no es grave y que se regenerará solo”, añade.

“A mi hijo, que tomó dos frascos del medicamento, todas las pruebas le han salido bien, aunque aún nos falta ir al cardiólogo en septiembre”, afirma la segunda madre. Aunque el pelo nacido ha empezado a caer, ambas mujeres lamentan que “lo hace poco a poco y los médicos nos han dicho que tardará meses en desaparecer”.

La Fiscalía de Cantabria abrió diligencias por estos hechos a principios de agosto después de que cuatro familias denunciaran el caso por vía penal.