En el marco del debate por el proyecto de ley de Interrupción Voluntaria del Embarazo, que se trata jueves y viernes en la Cámara de Diputados de la Nación, desde Canal 10 se consultó a uno de los especialistas. 

El Dr. Hugo Roland, exdirector del Hospital Rawson de Córdoba, confirmó en un móvil de Crónica de Mediodía, que se se trata de un problema de salud pública. 

"Hemos sido testigos de un verdadero drama sanitario: el aborto ilegal, hecho de forma precaria, sobre todo en las décadas de los '70, '80 y también en los '90, cuando no existía el misoprostol y las mujeres eran sometidas a prácticas muy inseguras, lo que ocasionaba una gran morbimortalidad. Había mucha demanda, mucha enfermedad y mucha mortalidad", detalló.

Roland informó que a esta situación se le sumaba el agravante de que las pacientes "estaban criminalizadas". "Con el correr del tiempo se está tratando esto como un problema de salud pública". 

El médico describió que muchas mujeres llegaban al hospital afectadas por "métodos folclóricos: agujas de tejer, pastillas de permanganato, tallos de perejil, y con bajo nivel de sanidad".

Así, afirmó que el aborto seguro existió siempre en Córdoba, "pero para aquellas con mayor poder adquisitivo podían y pueden acceder a interrupciones seguras". 

Roland consideró que, la interrupción legal y segura del embarazo, es un "derecho de todas las mujeres que decide sobre su cuerpo y debe hacer igualdad de condiciones entre todas las mujeres".

El especialista se refirió "al falso dilema de que regularizar esta situación (la aprobación de la ley de IVE) va a acarrear más abortos. Por el contrario. Se ha demostrado que en países donde el aborto es seguro, el aborto disminuye como también la morbilidad y mortalidad materna". 

Y concluyó que la aprobación de esta legislación "es para el bien de toda la sociedad".