La esperada conferencia de prensa del presidente Alberto Fernández de este domingo por la noche tiene ribetes históricos. La necesidad de aislamiento personal en la mayor cantidad de personas, para detener la circulación de coronavirus, es la cuestión.

Este lunes se oficializaron las principales medidas anunciadas, que apuntaban hacia la suspensión de clases hasta el 31 de marzo, el cierre de fronteras al ingreso de extranjeros, y el otorgamiento de licencias laborales para personas mayores de 60 años.

La suspensión de eventos masivos, y la recomendación de evitar reuniones, son parte central de las jornadas, desde hoy y por las siguientes dos semanas.

La idea es que las entidades clave, como las educativas, continúen abiertas, fundamentalmente para brindar el servicio de alimentación en comedores o viandas. El dictado “virtual” se va imponiendo en todos los niveles.

A lo sumo podrá ser una excepción el campeonato de fútbol profesional masculino, con la salvedad de que continúe a puertas cerradas. En buena parte del mundo, la actividad fue suspendida.