De acuerdo a información publicada por el diario The Wall Street Journal  y la Agencia Reuters, los laboratorios de Johnson & Johnson y AstraZeneca están llevando a cabo las primeras investigaciones para determinar si eventuales modificaciones de sus vacunas contra el Covid-19 podrían reducir o eliminar el riesgo de coágulos sanguíneos raros que podrían estar asociados a las inoculaciones.

Ambas vacunas contra el coronavirus han sido relacionadas con el riesgo de trombos sanguíneos, aunque los reguladores han dicho que los beneficios de las vacunas superan ampliamente los riesgos.

Los estudios están a cargo de científicos independientes y de la Universidad de Oxford que analizan casos inusuales de trastornos en la coagulación.

“Las empresas están avanzando rápidamente y creo que su deseo de alterar el vector o la vacuna avanza en paralelo a la explicación de los coágulos”, dijo Mortimer Poncz, jefe de la división de hematología pediátrica del Hospital de Niños de Filadelfia.

Desde el laboratorio de AstraZeneca aseguraron que están “trabajando activamente con los reguladores y la comunidad científica para comprender estos eventos de coagulación sanguínea extremadamente raros, incluida información para impulsar el diagnóstico e intervención tempranos y el tratamiento adecuado”.

Sarah Gilbert, vacunóloga de Oxford y co-inventora de la vacuna, adelantó que se están explorando posibles cambios en el mecanismo de administración de la vacuna y sostuvo que aún no puede predecir cuándo podría estar lista una vacuna modificada.

Las cifras

Los riesgos de coagulación combinados con plaquetas bajas en sangre -una enfermedad poco común denominada trombocitopenia trombótica inmunitaria inducida por vacuna, después de la inyección de AstraZeneca son aproximadamente de 1 a 2 por cada 100.000 vacunas, según los recuentos de casos del Reino Unido y Europa.

Estados Unidos muestra una tasa más baja de alrededor de 0,3 casos de la condición de coagulación por cada 100.000 dosis de la vacuna Johnson & Johnson. El riesgo de coagulación severa es generalmente más alto debido al propio Covid-19 aseguran investigadores y reguladores.

Para ambos laboratorios, minimizar los problemas raros de coagulación de la sangre podría ser clave para aumentar la confianza en las vacunas y abrir las puertas a un uso más amplio a largo plazo, especialmente si las vacunas de refuerzo se adoptan ampliamente.

Fuentes:  wsj.com / elmundo.es / reuters.com / infobae.com