El contexto lo marca la decisión gubernamental del retorno presencial a las aulas para el ciclo lectivo 2021, lo que demandará una mayor cantidad de circulación de personas.

Pero fundamentalmente, reunirá a niños, jóvenes y trabajadores diversos, docentes, de limpieza y administrativos, en un mismo lugar cerrado: los colegios.

Por eso, la "Red Argentina de Investigadorxs en Salud" emitió un informe con recomendaciones para actuar en los institutos educativos.

A sabiendas de que los contagios se producen por "la inhalación de aerosoles (pequeñas gotitas de fluido respiratorio) emitidos por una persona infectada", una de las clases es mantener ventilados los espacios.

"Ventilar o renovar el aire del aula significa reemplazar aire interior por aire exterior (presumiblemente libre de virus). El objetivo es reducir la concentración de posibles aerosoles contaminados, disminuyendo de manera simple el riesgo de contagiar y contagiarse", refiere el texto.

Recomienda, a su vez, "mantener la ventilación de forma continua y no solo entre clases", remarcando que "la abertura mínima necesaria depende de las condiciones ambientales: días sin viento son los que exigirán aberturas más amplias en las ventanas del aula".

Brinda detalles, a su vez, de la importancia de poder medir el dióxido de carbono en el interior de las aulas.