El viernes la Cooperativa de Carreros La Esperanza entregó un toldo, fabricado a partir de plástico reciclado, al jardín de infantes Canónigo Piñero.

La acción solidaria del grupo de trabajadores, con sede en barrio Villa La Lonja, llevó meses de preparación hasta llegar con el producto terminado al Campo de la Ribera.

A través de las redes sociales la cooperativa publicó fotos de las mujeres que trabajaron en el colorido toldo que les servirá a los niños y las niñas que asisten al jardín.

"Además de nuestras tareas como Servidores Urbanos, recuperamos y reciclamos plástico, dándole una nueva oportunidad a lo que otres descartan. Utilizamos bolsas como materia prima para construir tejidos con diversas funcionalidades, contribuyendo a la lucha por el cuidado de nuestro planeta", expresaron las cooperativistas.