Por Gabriela Weller*

La semana pasada se replicó en Córdoba la intervención artística “Un violador en tu camino”, nacida en Valparaíso y rápidamente contagiada a las plazas y calles de las principales ciudades del mundo.

Frente al Patio Olmos, cientos de mujeres respondieron a la convocatoria de Feministas Bailando Córdoba en el marco de las actividades contra la violencia del 25N y en solidaridad con sus compañeras chilenas.

Video realizado por @latintacba y @DivAC Cba

El país de Violeta Parra y Gabriela Mistral tampoco está exento del flagelo de la violación y los femicidios, un problema social cada vez más extendido en toda la región. Pero allí, en el marco de una tremenda movilización popular, un puñado de mujeres organizaron una intervención artística callejera que rápidamente se extendió por todo Chile: y la culpa no era mía, ni de dónde estaba ni de cómo vestía, corearon las jóvenes mientras marcharon y bailaron en plazas y calles, de Arica a Puerto Montt.

Una coreografía, un flashmob, una performance o simplemente arte callejero, con un denominador común: miles de mujeres replicando la actuación impulsada por el colectivo Las Tesis, integrado por cuatro treintañeras de Valparaíso.
A través de las redes @lastesis llamaron a difundir la situación de las mujeres chilenas. Pero muy posiblemente no sabían que con su actuación de este 25 de noviembre -Día internacional de la lucha contra la violencia hacia las mujeres- en pocas horas recorrerían el mundo entero.

En francés y sobre el fondo de la Torre Eiffel, las parisinas corearon “ce n'est pas ma faute”, pero antes fueron las colombianas, las peruanas, las ecuatorianas y las mexicanas. La Puerta del Sol se llenó de madrileñas denunciando “femicidios, e impunidad para el asesino”. Y otro tanto ocurrió en Buenos Aires, Berlín, Bruselas, Amsterdam...También la multicultural Nueva York replicó la creación del colectivo chileno. Y todas las intervenciones fueron registradas y subidas a las redes, con un efecto multiplicador que continúa hasta hoy.

Mujeres con voz y cuerpo en movimiento. Con los ojos vendados, evocando las torturas que numerosos organismos de derechos humanos denuncian en Chile. Jóvenes echando mano del arte, interrumpiendo la actividad urbana, sorprendiendo, provocando. Quizás por eso no dejan indiferente a nadie, tampoco en Córdoba.

*Editora de Género de los SRT