Este jueves se difundió el caso de Martín Castro, un bailarín de Colonia Caroya que debió ser internado y se encuentra en grave estado. Su mujer denunció un mal accionar por parte de los médicos dado que los trasladaron de Jesús María a Alta Gracia y se retrasó la intervención. 

El fin de semana comenzó a sentir síntomas de apendicitis y, según explicó su mujer Liliana a Canal 10, primero fueron a un dispensario. Allí los derivaron al hospital de Jesús María donde se confirmó que el cuadro era de una peritonitis.

Tras esto lo trasladaron de urgencia al hospital de Alta Gracia. Llegó allí con un cuadro de fiebre y, por eso, desde la guardia le indicaron que no lo iban a operar hasta que lo hisoparan y supieran el resultado.

"Quedé aislada, nadie más me dijo nada y el doctor no lo iba operar hasta que le hicieran el hisopado. Yo les dije que estaba grave y que no tenía coronavirus", planteó Liliana. Luego, una médica le explicó que hubo un mal accionar de la guardia pero Liliana no puede evitar el enojo.

"Mi marido como podía me mandaba mensajes. Ahora él está grave", lamentó.

La palabra del hospital

La directora del hospital de Alta Gracia, Mariana Garay, explicó que el hombre llegó con una apendicitis evolucionada. "Los estudios no mostraban signos de que había que operarlo de manera aguda", explicó.

"Cuando lo revisa la gente de la guardia se encuentran con que hay una neumonía bilateral y se ve que el paciente estaba con riesgos quirúrgicos", aclaró. Y señaló que el hisopado se le hizo porque venía de un lugar donde había pacientes con Covid-19 (el hospital de Jesús María).

De esta manera, la doctora dio a entender que no lo operaron de urgencia porque hubiera sido arriesgado. "Lo hubiera puesto en riesgo de muerte", indicó.