Al igual que los seres humanos, las estrellas nacen, se desarrollan y mueren. Éstas evolucionan lentamente y nuestro sol podría generar el fin del mundo en unos 4500 millones de años al pasar a la etapa gigante.

Los profesionales que estudian los sistemas planetarios han podido observar como después de varios cambios que sufren las estrellas, expulsan sus capas externas y se convierten en una nebulosa planetaria quedando en el centro una estrella muy compacta y caliente de baja luminosidad llamada "Enana Blanca"

En Ciudad U tomamos contacto con Cecilia Chavero, Astrónoma del Observatorio Astronómico de Córdoba para conocer sobre éstas investigaciones y comprender cómo funciona nuestro universo.