Una familia que llegó proveniente de Europa vivió momentos de preocupación debido a que por tener la vacuna antirrábica vencida de su perro, lo querían deportar. 

El Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa) retuvo a su mascota, llamada Coco. 

Franco, el dueño del perro aseguró que debió viajar al país desde Hungría por el la guerra en Ucrania con Rusia, por el cual no pudo solucionar la vacunación del animal. 

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Por ese motivo es que ofreció ir a un veterinario y hacer la cuarentena, pero desde Senasa al principio le negaron esa posibilidad, insistiendo en la deportación o sacrificarlo. 

Ante la repercusión por el caso, el organismo emitió un comunicado explicando que la medida era para garantizar el bienestar y prevención de enfermedades del país. 

Finalmente Senasa aceptó la propuesta de los dueños, y será vacunado y hará la cuarentena. 

Camila, otra de sus dueñas, dialogó con Canal 10 y aseguró: "La historia tuvo final feliz gracias a la gente, y al apoyo en redes sociales. Coco se va a quedar en Córdoba". 

COCO, EL PERRO VARADO EN EZEIZA, con FINAL FELIZ