Acumular un centenar de contagios de coronavirus en sólo una semana es, de acuerdo a lo que interpretan en la localidad de Bulnes, causa de una marcada "relajación".

Considerada durante los cinco primeros meses de la pandemia como "zona blanca" había otorgado ese status al distrito ubicado en el departamento Río Cuarto.

Hoy, con 125 casos positivos confirmados, la situación es la opuesta. Como botón de muestra del impacto de la pandemia, el propio padre del intendente Martín Toselli, falleció a causa de la patología. Hugo tenía 70 años.

Por el impacto reciente del coronavirus, ninguno de los casos aún recibió el alta médica, y tres personas debieron ser hospitalizadas. En total, hay ocho trabajadores de la salud infectados.

De acuerdo a los cálculos actuales del mandatario, casi la mitad de los habitantes de Bulnes se encuentra bajo protocolo de aislamiento por ser contacto estrecho con algún contagiado.