Mientras se atraviesa la segunda ola de contagios por coronavirus y la necesidad de continuar con el dictado de clases de manera mixta, incluyendo la presencialidad en las escuelas, se plantea el desafío de afrontar las bajas temperaturas con las aulas abiertas para mantener la ventilación recomendada.

En ese sentido, desde el ministerio de Educación de Córdoba anticiparon que, además de todas las acciones de prevención y cuidado como el uso de barbijos, el distanciamiento y el lavado de manos, se ha determinado la importancia de la ventilación en las aulas para evitar contagios.

“Hemos elaborado con el concurso de algunos expertos y sociedades científicas, pautar algunas normas de procedimiento ante las eventualidades de bajas temperaturas, con la base de la aireación cruzada necesaria para bajar los riesgos de contagios por coronavirus”, le dijo el subsecretario de Salud y Promoción Social del Ministerio de Educación, Carlos Paz, al programa Pensavalle Informa de Radio Universidad.

Pausas activas

Además de plantear la necesidad de mantener a los alumnos y docentes con abrigo suficientes dentro de las aulas, el funcionario provincial aseguró que “estamos pensando en el trabajo pedagógico hay situaciones de frío en donde se complica el trabajo en el aula”.

“Estamos trabajando, y ya tenemos experiencias en algunos lugares donde se están aplicando, con las denominadas pausas activas áulicas que consisten en parar unos minutos el dictado de clases y dentro de las mismas aulas realizar movimientos mediante actividades ludo-recreativas de movimientos para entrar en calor, siempre respetando el distanciamiento y el uso de barbijos”, explicó Paz.

En esa línea, el funcionario del ministerio de Educación adelantó que ya se están elaborando algunos “tips” para recomendar para los docentes, “porque está demostrado que este tipo de actividades aumentan la temperatura corporal y mejoran el clima de aprendizaje entre los alumnos”.

Nuevo protocolo sanitario en los colegios

Flexibilidad y criterio

En cuanto al resto de medidas adoptadas para enfrentar la pandemia y el frío manteniendo la presencialidad y los protocolos, el funcionario aseguró que “la pandemia nos ha llevado a intentar ser innovadores y pensar en este tipo de actividades”.

“Debemos tener el margen necesario de flexibilidad para que, en determinados momentos y lugares, por ejemplo, se pueda mover el horario de ingreso para esperar hasta la salida del sol”.

En cuanto a la posibilidad de suspender las presencialidad por las bajas temperaturas, eso depende de muchos elementos, estamos apelando al criterio de las autoridades educativas para valorar las situaciones en cada caso.

Hay que sostener la ventilación de los espacios como concepto básico, y luego intentar compensar la cuestión térmica para mantener el confort de los alumnos y evitar enfermedades.