Una nueva localidad debió asumir, en las últimas horas, que "el virus está acá". Se trata de Justiniano Posse, y el contexto es con una polémica en el medio.

Es que, con motivo de la celebración patronal del pasado martes 8, el Día de la Virgen Niña, trascendieron imágenes de una misa en la que confluyeron cientos de vecinos.

La falta del respeto a la "distancia social" y muchas personas sin portación de barbijo llamaron la atención. No fueron pocas las denuncias hacia el propio sacerdote, quien habría instado a que no se utilice la protección.

Por lo pronto, el intendente Gerardo Zuin encabezó un acto junto a autoridades sanitarias, para dar a conocer que tienen "un brote bastante notable". Una docena de casos durante el fin de semana y otros cuatro confirmados el martes son parte del paisaje.

Sin embargo, el mayor condicionante del reporte municipal refiere que hay "903 possenses continúan realizando el aislamiento obligatorio".