Este 6 de septiembre, las comunidades judías del mundo celebran el Rosh Hashaná o año nuevo judío 5782.

La celebración inicia este lunes. Los creyentes harán sonar 100 veces el shofar, un antiguo instrumento de viento hecho a partir del cuerno de un carnero. El sonido del instrumentpo "llama" a los judíos a la meditación y a la introspección, período que finaliza en el Yom Kippur (Día del Perdón), el 16 de septiembre.

"En pocas horas vamos a estar comenzando un nuevo año judío, el Rosh Hashaná (cabeza del año), 5782 años desde la creación del mundo, o como alguno sabios sugieren, desde la creación del hombre", dijo a Télam Marcelo Bater, rabino de la Comunidad Dor Jadash de la calle Murillo en el barrio porteño de Villa Crespo.

El rabino remarcó que el año nuevo judío es "una fiesta donde nos congregamos para rezar, pedir por buenos deseos y agradecer". Además, explicó que deberán celebrarlo como el año pasado, en medio de restricciones contra la pandemia.

"Una pandemia que se llevó miles de vidas, que nos muestra nuestras mejores virtudes y defectos. Que de alguna manera nos desnuda como 'seres humanos' y que nos invita a una verdadera introspección, al igual que el año nuevo judío", agregó.

"En los tiempos que vivimos pareciera que esta tarea se vuelve más difícil, y nos demanda más energía del alma. Sé que no es fácil, pero es importante que todos hagamos el ejercicio de la pausa, no a pesar de los tiempos difíciles, sino sobre todo por los tiempos difíciles", afirmó el seminarista Sebastián Hochstein, integrante de la Comunidad Pardés.