De manera escueta y a través del reporte diario que emiten las autoridades del Ministerio de Salud de la provincia, se dio a conocer una nueva restricción en Córdoba, en medio del proceso de "distanciamiento" atravesado en plena pandemia ecuménica.

Bajo el subtítulo "Disposiciones del COE", se informó que "las reuniones familiares están autorizadas únicamente los días domingos entre las 11 y 23 horas, prohibiéndose la realización o encuentro cualquier otro día de la semana".

Era uno de los permisos que se había estipulado con un gran anuncio del gobernador Juan Schiaretti, brindando la posibilidad de "abrazar a los más cercanos".

Pero la sistemática realización de cónclaves "ilegales", entre amigos, conocidos y allegados, superando largamente las 10 personas autorizadas, llevó a tal decisión.

El contexto es el sistemático aumento de los contagios en diferentes sectores de la provincia.

Ahora, en todo el territorio sólo están permitida durante un día a la semana.

Mientras tanto, continúan abiertos bares y restaurantes, que permiten que hasta seis personas, más allá de su vínculo, puedan ser parte de una misma mesa.

Por la situación epidemiológica, el COE adopta medidas y restricciones en la provincia