En esta penúltima entrega, Florencia Demarchi, voluntaria de canasta básica, y Claudia Albrecht, también voluntaria de canasta básica, anunciaron que por razones de salud debieron abandonar el Proyecto Czekalinski.

A lo largo del programa se analizó el estado de salud físico, psicológico y emocional de las dos voluntarias y, como producto del análisis de esos datos, el equipo médico de la investigación decidió que tanto Florencia como Claudia abandonen el proyecto debido al evidente el deterioro que produce consumir la canasta básico a la largo de 3 meses. Si continuaban con esta dieta, advirtieron los profesionales, se ponía en claro riesgo su salud.

Cada mes, las voluntarias se realizaron en el Sanatorio Allende los chequeos y estudios para determinar su estado de salud.

Con esta decisión, Martín Maldonado, director del Proyecto, resulta como único voluntario de canasta básica. Es complejo tener conocimiento cabal de su resistencia a esta experiencia, pero sí es posible advertir que su salud se ha visto resentida. Recordemos que además de los voluntarios de la canasta básica, el proyecto incluye otro grupo de personas que comen igual que siempre –es el denominado “grupo de control”– y otras que siguen la Guía Alimentaria para la Población Argentina (Gapa).

Proyecto Czekalinski: Las voluntarias abandonan el Proyecto (Parte I)

El proyecto Czekalinski busca demostrar los efectos de comer solo la canasta básica durante seis meses. A mitad de camino, exactos tres meses, dos de tres voluntarios, por problemas de salud, no lo lograron. Las conclusiones de una canasta básica obsoleta y no saludable están a la vista.

Proyecto Czekalinski: Las voluntarias abandonan el Proyecto (Parte II)