La National Geographic dio a conocer un secreto a voces entre los expertos en oceanografía: el mundo tiene cinco océanos, no cuatro. Es que aseguran que tras años de estudio lograron determinar una masa de agua totalmente distinta a las demás.

Se trata del “ Océano Austral” y está compuesto por el agua que rodea a la Antártida. "Cualquiera que haya estado allí tendrá dificultades para explicar qué tiene de fascinante, pero todos estarán de acuerdo en que los glaciares son más azules, el aire más frío, las montañas más intimidantes y los paisajes más cautivadores que en cualquier otro lugar al que puedas ir", aseguró a la revista, Seth Sykora-Bodie, científico marino de la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica (NOAA) y Explorador de National Geographic.

“El Océano Austral ha sido reconocido por los científicos durante mucho tiempo, pero como nunca hubo un acuerdo internacional, nunca lo reconocimos oficialmente”, dijo al New York Post Alex Tait, geógrafo de la National Geographic Society.

Los cartógrafos de National Geographic han enumerado cuatro océanos de la Tierra desde que la sociedad comenzó a hacer mapas en 1915.

“El quinto océano es una especie de nerd geográfico de alguna manera. Siempre lo hemos etiquetado, pero lo hemos etiquetado de forma ligeramente diferente (a otros océanos). Este cambio fue dar el último paso y decir que queremos reconocerlo por su separación ecológica”, dijo Tait.

Históricamente, las aguas que rodean a la Antártida se consideraban una extensión de los océanos Atlántico, Pacífico e Índico. Pero en los últimos años, los científicos se han concentrado en la naturaleza única de las aguas antárticas, en gran parte debido a las corrientes únicas que fluyen allí, conocidas como Corriente Circumpolar Antártica, dijo la revista National Geographic.

La corriente hace que las aguas sean más frías y un poco menos saladas, lo que ayuda a almacenar carbono en las profundidades del océano y tiene un impacto crítico en el clima de la Tierra.

La National Geographic Society ya está cambiando el mapa del mundo para incluir al Océano Austral.

Tweet de National Geographic

Esta determinación surgió tras años de debates entre los geógrafos con el fin de determinar si estas aguas tenían suficientes características como para merecer su propio nombre o si simplemente se trataba de extensiones (con otro clima), de los demás océanos.

Tait asegura que esta iniciativa se tomó en el marco de los intentos de la sociedad por conservar los océanos del mundo. “Este cambio fue dar el último paso y decir que queremos reconocerlo por su separación ecológica”, sintetizó.

El informe de la revista señala que hay miles de especies que viven allí y en ningún otro lugar y que a su vez tiene efectos ecológicos en otras zonas. Las ballenas jorobadas, por ejemplo, se alimentan de krill frente a la Antártida y migran hacia el norte para pasar el invierno en ecosistemas muy diferentes frente a América del Sur y Central. Algunas aves marinas también migran hacia adentro y hacia afuera.

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