Otra reacción adversa a la vacuna contra el Covid-19
Se produjo un segundo posible caso de enfermedad neurológica en un voluntario de la vacuna de Oxford.
Según el diario norteamericano New York Times, se informa de que un segundo paciente ha desarrollado mielitis transversa.
Por su parte, la compañía farmacéutica afirma que "no hay evidencias" de que la vacuna haya provocado esta enfermedad
Desde AstraZeneca suspenderían los ensayos de la vacuna de Oxford por la "reacción adversa grave" de un voluntario ya que la farmacéutica sueco-británica que en colaboración con la Universidad de Oxford trabaja en el desarrollo de una vacuna contra el Covid-19, ha sufrido un nuevo contratiempo en su carrera por conseguirla.
Días después de comunicar que uno de sus voluntarios había desarrollado una "reacción adversa grave", que después se conoció que era una mielitis transversa, el periódico norteamericano informa de que otra de las personas participantes en el ensayo también ha desarrollado un problema neurológico.
El periódico cita a fuentes cercanas al desarrollo de la vacuna que aseguran que este segundo paciente también sufriría mielitis transversa.
El experto en vacunas de la Universidad de Ciencias y Salud de Oregon (EEUU), Mark Slifka, ha advertido que "si hay dos casos" de la misma enfermedad "empieza a haber un patrón peligroso".
Por su parte AstraZeneca asegura que es "poco probable" que estas enfermedades estén asociadas y que "no hay evidencias" para afirmar "con certeza" que su vacuna pueda provocarlas.
Como ya se explicó, la mielitis transversa es un trastorno neurológico que causa la inflamación de la médula espinal.
Esta afección daña la mielina, es decir, el material aislante que cubre las fibras de las células nerviosas.
Esta lesión altera el sistema nervioso al interrumpir la comunicación entre los nervios de la médula espinal con el resto del cuerpo.
Si bien todas las fuentes de información toman con cautela esta probable nueva frustración en la carrera contrarreloj por producir una cura contra el coronavirus, sería difícil asegurar a estas alturas la continuidad de los ensayos sin una profunda revisión de la vacuna que se les está inyectando a los voluntarios.