La situación que viven las familias de padres separados y el cuidado de los niños en medio del aislamiento social, preventivo y obligatorio, atraviesa por diferentes momentos y se debe adecuar los derechos y las obligaciones al contexto de crisis sanitaria. 

En esta cuarentena la tenencia de los hijos se vuelve unilateral, ya sea en el hogar el paterno o materno para evitar el traslado. 

El Ministerio de Desarrollo Social autorizó a los niños a regresar a la casa donde tenia su residencia habitual por única vez. Luego se incorporaron otras excepciones, tal como si uno de los padres debe concurrir a su lugar de trabajo, el niño/a puede quedarse bajo el cuidado del otro progenitor. 

Sin embargo existen múltiples escenarios que no siempre encuentran fácil solución. Según datos del Ministerio de la Mujer cerca del 35% de las consultas que reciben en este tiempo se vinculan con el cumplimiento del régimen paterno-filial.

En la mayoría de los casos los cuidados se están llevando en el hogar de la madre, por lo que el desequilibrio es mayormente constatable.

Desde los juzgados de familia apelan a la comprensión de lo padres de esta situación de excepción, mientras atienden las causas urgentes por teletrabajo. 

Gabriel Tavip, doctor y juez de Familia, en entrevista con Canal 10, aseguró: "Todavía la Nación no ha modificado ninguno de los aspectos que se han dispuesto y los jueces estamos de acuerdo con lo establecido". 

"Vamos a ver cómo seguimos tomando audiencias. Los siete jueces que estamos trabajando en familia tomamos contacto con todas las causas urgentes, porque están suspendido los plazos, tales como la cuota alimentaria", sostuvo.

Por otra parte, Romina Scoccoza, abogada especialista en familia, en diálogo con Canal U , puso en relieve la importancia de reforzar los vinculos, pese a que no se conviva.

"La coparentalidad no es sólo en lo físico. En este momento hay que pensar con creatividad. No esta suspendida. Está suspendido sólo el traslado", expresó. 

Se estimula el uso de la videollamada, para que los padres que no compartan vivienda, se sumen a la vida diaria de sus hijos, tal como mantener un juego de ajedrez, una función de títeres online. 

En el aislamiento la situaciones conflictivas han aumentado, ya sea por el costo económico, sentimental, físico puertas adentro de un hogar, y sin la redes habituales de contención, como lo pueden ser los abuelos, que ayudaban en el cuidado de los niños.

Por eso se aconseja buscar nuevos canales para la emocionalidad y que este tiempo de aislamiento tenga el menor impacto emocional y de derechos, poniendo siempre al niño/a, como el sujeto a proteger. 

Entrevista con el juez Gabriel Tavip