Entre las personalidades presentes en la apertura del Congreso Internacional de la Lengua Española (CILE) que se desarrolla en la ciudad de Córdoba, se encuentra el periodista y escritor argentino, Martín Caparrós.

Durante la inauguración, Caparrós expresó que “para hablar de la lengua los menos apropiados son los reyes, los presidentes y ese tipo de gente. Vengo porque me da curiosidad la sala y ver cómo se las arreglan”, aunque descartó que a lo largo del Congreso se produzcan debates interesantes.

Ante la consulta sobre el lenguaje inclusivo, el escritor opinó que le “parece bien”. “Me parece que la lengua evoluciona, hablamos como hablamos porque ya no hablamos como en 1810 o en 1540. Si ahora hay un grupo que intenta hacerla evolucionar en esa dirección, bienvenido sea”.

A su entender “todas las corrientes que tironean la lengua, que la estiran, que la alargan, que la cambian, me interesan y me gustan. Vamos a ver si esta funciona, por el momento parece que en ciertos sectores funciona, es limitado. Es mas su repercusión mediática que su extensión en la población”.

Caparrós participó el martes, junto a otros especialistas disertantes, de un panel sobre ‘Periodismo digital: los retos de una lengua en Internet’. “Las tecnologías que nos están cambiando la vida se manejan con palabras”. Ejemplificó así el uso del correo electrónico y el Whatsapp.

“No es que la palabra pierda su valor, no tenemos otra forma de comunicarnos. Cuando aprendamos a enviarnos imágenes pensadas sin necesidad de traducirlas en palabras, va a ser maravilloso y ojalá nos tocara verlo”,manifestó en un móvil de Canal 10.

Por otra parte, en relación al uso del periodismo, las fakenews y la postverdad, caparrós comentó que hay una “dispersión muy grande de la producción de noticias”. Actualmente, “se producen noticias desde muchos mas lugares, entonces ya no se tiene la garantía de esos grandes medios que te decían que lo que contaban era verdad aunque no lo fuera”, comentó Caparrós.

Esta “dispersión” tiene dos caras de una misma moneda. Por un lado, según describió el escritor, permite acceder a más información de un mismo hecho, pero por otro hace que algunas de esas informaciones sea falsa. Por ello, destacó la importancia de la “educación del receptor de la noticia para aprender a saber en qué creer y en qué no. eso es decisivo y no lo estamos haciendo”.

Caparrós también opinó sobre la incursión de Marcelo Tinelli en la política: “Me daría tanta decepción que mis compatriotas votaran a un pequeño pornógrafo, un señor al que sólo conocemos porque ha mostrado culos de señoras por televisión. Me parecería tan triste como radiografía de la Argentina que me iría de nuevo”.