Desde la Federación de Bioquímicos de Córdoba ven con preocupación la caída en los controles de enfermedades crónicas y embarazos ante el aislamiento obligatorio dispuesto por el gobierno nacional. 

Carlos Navarro, presidente de la Federación de Bioquímicos, destaca que se dispusieron sistemas para realizar pedidos médicos de forma digital y que se concreta la toma de muestras a domicilio, para que los pacientes no salgan de sus casas. 

Aún así, y realizando una comparación entre el 15 de marzo y 15 de abril de 2020 y el mismo período de 2019, observan que hay una disminución en la cantidad de controles que se realizan. "En el caso de hipertensión arterial en afiliados de Pami, sólo se atendieron un 25 por ciento, y en el caso de Apross, un 37 por ciento. Es decir que hubo una no atención o falta de control por parte de los beneficiarios de estas obras sociales, en promedio, de un 30 por ciento", afirmó.

"Si tomamos diagnósticos de diabetes" - explicó - "también hubo un 25 por ciento en Pami y un 30 por ciento en Apross. También es llamativo en los embarazos, en casos de planes maternos infantiles, en Apross hubo una disminución de la población activa de un 30 por ciento. O sea que esos embarazos no se hicieron controles y esto puede generar dificultades", apuntó.

Y agregó que si bien es cierto que la prioridad hoy es combatir la pandemia de coronavirus, "en nuestra sociedad desde siempre tuvimos grandes inconvenientes con la hipertensión, la diabetes, cánceres de distintos tipos, donde los laboratorios juegan un papel importante. Hemos generado acciones que no tuvieron mucho resultado, porque si se ven los números, se observa que hubo una disminución importante en la atención", expresó.

Medidas contra el coronavirus

Navarro expresó que desde la Federación de Bioquímicos se tomó una serie de recaudos para combatir la pandemia y seguir sosteniendo la atención al público.

"Siempre estuvimos en actividad, no sólo por el aporte que se puede hacer en la lucha contra el Covid-19, sino particularmente para tratar de sostener la prestación en enfermedades crónicas", aseguró, y agregó que desde sus instituciones acompañan las acciones de aislamiento, y se comunicaron con las obras sociales para evitar la movilidad de los pacientes. 

"Pusimos sistemas informáticos para tratar de implementar pedidos electrónicos, para que el médico pudiera hacer llegar ese pedido al paciente y el laboratorio pueda asistir a tomar la muestra. Así se trabajó pero de manera disminuida. En Apross se está desarrollando un sistema y están avanzando bastante, en Pami enviaron el pedido hecho por bioquímicos y no hay respuesta", una de las medidas.

Asimismo, se planteó a las obras sociales la necesidad de eliminar el soporte papel. Ante la falta de evidencia científica respecto a la forma de contagio, "nos pareció que el soporte papel puede traer riesgo. El pedido médico hecho en papel se genera en una clínica, sanatorio o consultorio médico; de ahí va al laboratorio, y son ambientes altamente contaminantes, no solo con el virus sino con cualquier otro patógeno. Se generó un sistema para que el bioquímico no tuviera que llevar ese papel", expresó Navarro.

También se ofreció a las obras sociales enviar el listado de las prácticas que hacen los bioquímicos de forma digital, evitando usar el papel. "Eso dio buen resultado. Algunas obras sociales al principio se resistieron, pero al ver la forma en que se extiende la pandemia, terminaron aceptándolo", concluyó.