Un grupo de investigadores del Conicet llevan adelante el denominado “Proyecto Czekalinski” con el que buscan conocer el impacto en la salud de quienes consumen de manera exclusiva los alimentos que integran la actual Canasta Básica Alimentaria (CBA) que en la actualidad marca la línea entre pobreza e indigencia.

La investigación está coordinada por Martín Maldonado, investigador del Conicet y especialista en políticas de inclusión y busca demostrar las falencias del actual sistema de medición de la pobreza que tiene el país desde hace más de 30 años y que sólo tiene en cuenta los ingresos familiares para determinar las categorías de “pobres” e “indigentes”.

La medición es muy obsoleta, fue diseñada en 1985 y se aplicó por primera vez en 1988. Desde entonces solo ha sufrido actualizaciones menores. Nosotros hacemos ciencia que incomoda, no entendemos una ciencia de laboratorio y por eso cuestionamos el método", indicó Maldonado a Canal 10.

La investigación durará seis meses en los que habrá tres grupos de seis personas cada uno que se alimentarán de manera diferenciada para luego evaluar los efectos de esas dietas en sus organismos.

Uno de los grupos comerá sólo lo que propone la canasta básica alimentaria. Otro seguirá la dieta de las guías alimentarias para la población argentina publicadas por la secretaría de Salud. El último equipo no hará modificaciones en su alimentación habitual.

Todos los participantes del proyecto se someterán a chequeos médicos periódicos para evaluar el impacto de las diferentes dietas en sus cuerpos.

"Proponemos que la pobreza se mida desde un enfoque multidimensional, contemplando una gama de diferentes desventajas que experimentan las personas en situación de pobreza. Vamos a poner en debate nacional la forma de calcular la pobreza en Argentina que rige desde 1988, sin cambios ni actualizaciones, midiendo la pobreza en función de la falta de dinero únicamente”, aseguran los investigadores en la página de Facebook donde publican los detalles del proyecto.