La vacuna contra el Covid-19 que están desarrollando en conjunto el laboratorio AstraZeneca y la Universidad de Oxford, produce una respuesta inmune similar tanto en adultos mayores como en adultos jóvenes informó este lunes la farmacéutica británica.

Mediante un comunicado, se consignó además que las respuestas adversas fueron menores entre los ancianos.

Los ensayos clínicos de la vacuna están en la denominada fase 3, que es la última antes de conocer con certeza si es segura y si permite proteger a la población de la enfermedad.

Según sus desarrolladores, la vacuna desencadena anticuerpos protectores y células T en grupos de edad avanzada.

Los datos publicados en julio, mostraron que la vacuna generó “respuestas inmunes robustas” en adultos sanos de 18 a 55 años, generando anticuerpos y las llamadas células T, cuyo principal propósito es identificar y matar patógenos invasores o células infectadas. Se cree que la inmunidad de las células T es esencial para la protección contra la infección por el virus y podría proporcionar una inmunidad a más largo plazo que los anticuerpos, aseguraron los investigadores.

Para la empresa, estos resultados consolidaron aún más el cuerpo de evidencia de la seguridad y efectividad de su medicamento.

Por otra parte, informaron que “la reactogenicidad (reacciones adversas comunes), fue menor en los adultos mayores, donde la gravedad de la enfermedad Covid-19 es mayor”, declararon desde el laboratorio a la Agencia Reuters.

Además del contrato de la UE con AstraZeneca, los Gobiernos de Argentina y México, así como la fundación mexicana Slim, llegaron a un acuerdo con la farmacéutica y Oxford para fabricar la vacuna destinada a sus países y distribuirla después al resto de América Latina, excepto Brasil.

Además del Reino Unido, las pruebas clínicas se han desarrollado en Estados Unidos, Brasil y Sudáfrica.

Fuentes: Reuters / EFE / infobae.com