El represor de la Esma, Gonzalo Sánchez, alias "Chispa", fue detenido este martes en Río de Janeiro por la Policía Federal Brasileña. Entre muchos otros crímenes de lesa humanidad, Sánchez integró el grupo de tareas que secuestró al escritor y periodista Rodolfo Walsh.

El represor de 69 años, acusado de haber participado en alrededor de 900 hechos, será extraditado a la Argentina, lo que marcará la primera extradición relacionada con derechos humanos durante el gobierno de Jair Bolsonaro.

"El pedido de prisión preventiva para extradición fue formulado por la representación nacional de Interpol, con base en informaciones de las Alertas Rojas incluidas allí por las autoridades argentinas", dice el comunicado.  Sánchez había sido detenido en 2013 en  Angra dos Reis pero en 2016 obtuvo la prisión domicilaria y logró escapar.

Participó de los llamados "vuelos de la muerte" y hay abundante documentación que lo involucra en crímenes de lesa humanidad, ya que, creyéndose impune, él mismo les contó lo que hacía a militantes detenidos, como Graciela Daleo u Horacio "Nariz" Maggio.

Maggio contó que "Chispa" describió la evolución del exterminio de los prisioneros en la Esma: primero los colocaban en un  auto al que incendiaban, luego los ahorcaban y los tiraban al río, y finalmene optaron por los "vuelos de la muerte": subirlos, dormidos con un somnífero, a un avión, y arrojarlos desde allí.

Sánchez trabajaba en la industria naval en el litoral de Río de Janeiro.