La investigación por la muerte de Samir Vázquez (20), tras ingerir una pastilla de éxtasis en una fiesta clandestina el año pasado,  fue elevada a juicio este miércoles con tres imputados.

El fallecimiento del adolescente ocurrió el 6 de octubre de 2019 en una quinta ubicada en el Camino 60 cuadras de la Ciudad de Córdoba. 

La Fiscalía del Fuero de Lucha contra el  Narcotráfico, a cargo de Carlos María Cornejo, constató que las productoras Peca2 y Journey, que llevaron adelante el evento, funcionaban no contaban con las habilitaciones correspondientes.

Las imputaciones apuntan contra los organizadores Alejandro César Aguirre, Ricardo Marconi y Gonzalo Ortiz cómo así también contra Ariel Antonio Carlettini, quien supuestamente debía brindar asistencia médica a los concurrentes. Todos se encuentran bajo prisión preventiva.

Las acusaciones refieren a la facilitación de lugar para que concurran personas con el objeto de usar estupefacientes triplemente agravado por ser en perjuicio de menores de 18 años de edad; por la intervención de tres personas de manera organizada; y por haberse realizado en un sitio en donde se llevó a cabo un espectáculo público. En el caso de Carletti fue imputado como partícipe necesario.

En paralelo la Fiscalía de Instrucción del Distrito 2, Turno III, inició una investigación penal con motivo del fallecimiento de Samir Velázquez, por la que Alejandro César Aguirre, Ricardo Marconi,  Gonzalo Ortiz y Ariel Antonio Carlettini fueron imputados como supuestos autores del delito de Homicidio Culposo encontrándose esa causa en estado de investigación.