Andrea S. (54) cayó a las vías de la estación Pueyrredón de la línea D en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires segundos antes de que llegara una formación al andén.

La docente fue empujada por un hombre, quien terminó detenido. Trastabilló mientras intentaba estabilizarse pero terminó inconsciente, ya que en la caída se golpeó la cadera y la nuca con las vías.

Por fortuna, el tren que llegaba logró frenar a un metro de la mujer tras el aviso de los otros transeúntes. Tras el susto, tanto ella como el hombre fueron trasladados a la guardia del Hospital Juan Fernández.

Según fue comprobado posteriormente, el hombre tenía una patología previa que lo hizo sentirse mal. Volvía del trabajo a su casa cuando se desmayó en el andén y fortuitamente empujó a la mujer a las vías.

Cuando llegaron al hospital, se constató que la mujer sufrió un fuerte traumatismo de cráneo y una fractura en el hueso sacro. Posteriormente, fue trasladada a la Clínica del Sol y espera el alta para la semana próxima. El hombre permaneció internado para analizar las posibles causas del desmayo y controlar el corte y el golpe en su cabeza.

Mientras tanto, el fiscal Walter López ya investigaba el caso y abrió tres posibles hipótesis: un robo, un ataque o un hecho fortuito. López decidió detener al hombre que se desmayó hasta que se obtuviera la información suficiente sobre lo que pudo haber sucedido.

Con el correr de las horas y la aparición de las pruebas, la fiscalía comprobó que se trató meramente de una casualidad y el hombre fue liberado antes de las 20 del miércoles.

“Después de haber hecho el análisis de toda la información con la que contábamos, la situación de él respondió a lo que llamamos ‘Falta de Acción’. Es decir que en principio, no hubo acción ni conocimiento ni voluntad de realizar una conducta determinada. En este caso, ni siquiera es una situación de negligencia. El desmayo provocó la caída del cuerpo y así terminó empujando a la persona”, afirmó el fiscal López a Telefe Noticias.