“Parece un capítulo de Los Simpsons, pero es la lamentable realidad de un gobierno al que no le importa la salud de los cordobeses ni del medio ambiente”, escribió la diputada nacional Olga Rista, del radicalismo.

De este modo, la diputada reclamó en las últimas horas medidas “urgentes” para sanear el lago San Roque.

La comparación con un episodio de la popular serie Los Simpsons es instantánea.

Se vincula, como muchas ocurrencias de la vida cotidiana,  a un episodio de la serie animada en la que el magnate y aspirante a la alcaldía de Springfield, Montgomery Burs, pierde las elecciones al no poder comer un pescado de tres ojos cuya extraña forma se atribuye a la contaminación que la planta nuclear produce en el agua.

Según publicaron grupos de pesca, dicho pez fue obtenido durante el sábado pasado frente al casino de villa Carlos Paz.

En enero de este año, desde la Red Universitaria de Ambiente y Salud, y Médicos de Pueblos Fumigados publicaron un estudio que analiza cuáles son los principales problemas que afectan la calidad de aguas superficiales y la descomposición que sufre el lago San Roque.

De acuerdo a lo relevado en el informe “la situación es gravísima”.

“Desde 2010 hasta 2019, según el Laboratorio de Bioremediación Municipal de Villa Carlos Paz, el lago recibe 8 mil toneladas de materia fecal por año, a consecuencia del crecimiento poblacional solamente gestionado por el interés inmobiliaria y la falta casi absoluta de cloacas y tratamiento de excretas. Lamentablemente esta es la fuente de agua potable para casi la mitad de la población de Córdoba”, resalta.

"Sus superficies se encuentran cubiertas por una capa de color verde o verde azulada, generada por la presencia de gran cantidad de microalgas y de bacterias productoras de pigmentos. Este proceso de degradación se genera porque reciben una alta cantidad de nutrientes, particularmente con fósforo y nitrógeno, que favorecen el desarrollo o proliferación de distintos microorganismos, principalmente cianobacterias”, agrega el estudio.

Asimismo, un estudio de la Facultad de Ciencias Químicas de la Universidad Nacional de Córdoba (UNC) asegura que “la eutrofización de las fuentes de agua es un proceso natural que se encuentra multiplicado y acelerado por la contaminación humana, principalmente vertimientos de líquidos cloacales crudos o sin tratar (pozos negros y sangrías generalizada), que además se agrava notablemente con el cambio climático”.

Cabe destacar que entre los efectos adversos que producen estas bacterias en la salud humana, se pueden mencionar problemas gastrointestinales, hepáticos, respiratorios, cutáneomucosos o neurológicos.