La ONG Portal de Belén presentó un recurso para que la Corte Suprema de Justicia de la Nación revise el fallo del Tribunal Superior de Justicia de Córdoba que habilitó la interrupción del embarazo en ciertas circunstancias.

Ahora el Tribunal Superior debe resolver si el caso llega al máximo tribunal de la Nación mientras que por ahora, la Guía de Procedimientos está suspendida para la Atención de Aborto No Punible y seguirá así en los hospitales provinciales, pese a que el Tribunal Superior de Justicia (TSJ) la declaró constitucional el pasado 18 de diciembre.

El miércoles último, la ONG católica Portal de Belén presentó un recurso extraordinario federal para llevar el expediente ante la Corte Suprema de Justicia de la Nación, para que resuelva el fondo de la cuestión.

En tanto en Tribunales los actores judiciales no se arriesgan a predecir cuánto duraría este nuevo proceso, mientras lo que sí es concreto es que en los hospitales provinciales el protocolo de prácticas para los casos de interrupciones de embarazos previstos desde 1921 en el Código Penal: productos de violencia sexual, cuando la vida de la mujer corre riesgo, o si se trata de una mujer con discapacidad mental, no podrá aplicarse hasta nuevo aviso.

La encrucijada de hoy se inició con el proceso judicial del 18 de diciembre pasado, después de casi siete años de trámites, cuando el Tribunal Superior de Justicia consideró por mayoría que la guía es constitucional, aunque 24 horas antes de que venciera el plazo de apelación, Portal de Belén solicitó que intervenga la Corte Suprema.

Para Católicas por el Derecho a Decidir, que impulsan la aplicación de la guía, ir a la Corte Suprema es un contrasentido: “No hay razones para conceder el recurso. ¿Por qué? Porque tanto la sentencia del TSJ como la guía responden a los lineamientos ya dados por la Corte en 2012 en un fallo específico sobre aborto no punible. Por eso, volver a la Corte es absurdo”, dice Eugenia Montes, letrada de la ONG en el expediente.

Para Portal de Belén, en cambio, el TSJ sólo debe valorar los aspectos formales del recurso de apelación: “El TSJ no puede resolver sobre el fondo porque ya se expidió; así que debe dejarle ese rol a la Corte Suprema, que debe expedirse respecto de la violación del derecho a la vida”, dijo Amelia Moscoso, letrada de Portal de Belén.

El antecedente más inmediado se dio cuando el Portal de Belén en 2012 logró la suspensión de la aplicación de la guía a través de una cautelar y ahora se junta con el fallo de fondo respecto de la constitucionalidad de los abortos no punibles previstos en el Código Penal, aunque esta última cautelar va por separado.

La visión de Católicas por el Derecho a Decidir es totalmente opuesta y el colectivo sostiene que la medida cautelar que mantiene suspendida la guía debe ser resuelta por el TSJ de forma separada al recurso extraordinario que llevaría el expediente a la Corte Suprema.

Lo cierto es que el paso siguiente será que el TSJ resuelva si acepta o no el recurso, por lo que debe realizar un proceso de varios días hábiles, trámite en el que habrá notificaciones e incidentes y cuyo debate promete un nueva nueva pelea judicial sobre este controvertido tema donde se ponen juego cuestiones de salud pública, derechos humanos, planificación familiar, preceptos religiosos y posiciones conservadoras versus las que se ubican en la vereda de enfrente y son tildadas de peligrosamente liberales.