Aquel día fue una hecatombe para Brasil, el organizador del mundial 2014. La Canarinha enfrentaba a Alemania en una de las semifinales, con la clara intención de ir en la búsqueda de  su sexto título.

Pero todo salió mal. Los teutones fueron un tsunami de toques y goles, plasmados en un 7 a 1 histórico, que hoy fue recordado con cierto burla e ironía por la página oficial de la selección de Alemania en su versión en español.

"No metíamos 7 goles en un partido oficial desde…bueno seguro ustedes lo recuerdan…". La frase remite a lo que sucedió un 8 de julio en el estadio Mineirao de Belo Horizonte, cuando los europeos anotaron a través de Tony Kroos (2), André Schurrle (2), Miroslav Klose, Thomas Muller y Sami Khedira y dejaron el tanto de Oscar como único consuelo para los anfitriones.

Con ese resultado Alemania se clasificó a la final que disputaría con Argentina, la que ganaría por 1 a 0 con tanto de Mario Gotze.