El Observatorio Astronómico de Córdoba está de festejo. Y es porque la Unión Astronómica Internacional (UAI) designó “Martín Leiva” al asteroide 33285, en reconocimiento al investigador y docente de esta institución. La nominación fue difundida a través de la circular del Minor Planet Center.

Se trata del quinto asteroide nombrado bajo un científico perteneciente al OAC.

En general, el nombramiento de estos objetos es una distinción a quienes han realizado una contribución destacada en el campo de estudio de los pequeños cuerpos celestes, y son considerados líderes del futuro en sus áreas de investigación.

¿Qué son los asteroides y por qué los estudia el OAC?

En diálogo con el programa Data Universitaria, de Canal 10 y Canal U, Leiva celebró este nombramiento y señaló que se trata de un “mimo” para aquellas personas que integran el área de ciencias planetarias del OAC.

“Es un reconocimiento extraño y lindo. Se trata de un objeto pequeño de seis kilímetros de diámetro que se encuentra en el medio del cinturón principal, aproximadamente a 450 millones de kilómetros, y que tiene una órbita un poco inclinada”, señaló el actual secretario de Extensión del OAC.

En ese sentido, el investigador agregó que “no ha tenido tiempo de bajar los elementos orbitale para integrarlo y aplicarles las técnicas que hacen en el grupo para poder predecir la trayectoria de un futuro". 

Qué son los asteroides

Son cuerpos rocosos y metálicos que orbitan alrededor del Sol. Son remanentes de la formación temprana del sistema solar.

Se consideran como restos de planetesimales, esto es, pequeños objetos formados en el disco protoplanetario alrededor del Sol hace aproximadamente 4,6 mil millones de años. Por eso su estudio proporciona información relevante sobre la historia y evolución del sistema solar, así como sobre los procesos de formación planetaria.

Los asteroides varían en tamaño. Van desde pequeñas rocas hasta objetos de varios cientos de kilómetros de diámetro. La mayoría se encuentran en el “cinturón de asteroides”, una región entre las órbitas de Marte y Júpiter. Sin embargo, existen algunos cuyas órbitas cruzan la de la Tierra. En estos casos, su monitoreo y estudio adquieren relevancia por el riesgo de impacto con la superficie terrestre.