El secretario de Transporte de la Nación, Franco Mogetta, definió el paro de UTA de hoy como parte de los “métodos extorsivos” de los gremios, pero cargó contra las empresas al anunciar que multarán a las que no sancionen a los choferes que no tomaron tareas para adherir al paro.

En declaraciones a la señal TN, el funcionario advirtió: “Nosotros estamos tomando medidas para poder reestablecer el servicio a los usuarios, que están siendo víctimas de antiguos métodos extorsivos por parte de algún sector gremial, porque también se enmarca en una interna gremial que tiene la UTA. Hay una parte del sistema que está funcionando porque no hay motivo para el paro que han iniciado desde una facción. Están tomando de rehenes a los usuarios”. 

En el marco del conflicto la Secretaría de Trabajo convocó al mediodía a una reunión con las partes, en un intento por desactivar la protesta, pero el conflicto aún sigue abierto.

"Vamos a pedir que se levante la medida de fuerza para seguir negociando pero con los colectivos funcionando", dijo Luciano Fusaro, vicepresidente de la Asociación Argentina de Empresarios del Transporte Automotor, antes de ingresar a la reunión.

El argumento del gobierno es que los 250 mil pesos que reclaman los choferes no fueron homologados todavía por el Secretario de Trabajo Julio Cordero y por eso, la UTA no está en posición de reclamar su pago.

Como si no fuese parte del gobierno que, debería homologar los acuerdos alcanzados libremente entre las partes, Mogetta planteó: “Que haya una expectativa por parte del sindicato no les da derecho a retener tareas, es un paro extorsivo, es egoísta”. No emitió opinión sobre la mora del gobierno para homologar convenios paritarios.

Contra las empresas

Pero las amenazas del funcionario se centraron sobre las compañías prestadoras del servicio. “Estamos empezando a accionar contra las empresas que no llevan a cabo los servicios y que tampoco toman sanciones contra los que no se están presentando a trabajar”. Todo indica que se podría abrir otro frente de conflicto porque seguramente las empresas argumentarán que no pueden sancionar a los trabajadores en el marco de una convocatoria de su gremio.

“Se están sancionando con multas a las que no prestan servicio. No podemos despedir trabajadores, pero podemos despedir empresas. Vamos a ir hasta las últimas consecuencias” es la amenaza que dejó en el aire.