En medio de la interna del Frente de Todos, el ex titular del bloque kirchnerista en Diputados, Agustín Rossi, expresó su respaldo hacia el presidente Alberto Fernández.

En este sentido, se realizó este sábado en la ciudad de Rosario un encuentro de los referentes de La Corriente Nacional de la Militancia de Santa Fe, con la fuerte presencia de funcionarios del Ejecutivo nacional como Cecilia Todesca, Ricardo Forster y Guillermo Carmona. También fueron de la partida los ministros Jorge Ferraresi, de Hábitat, y Juan Zabaleta, de Desarrollo Social.

En declaraciones a Crónica Matinal, el dirigente santafesino remarcó que el Gobierno debe apuntar a “gestionar y hablar por su gestión”.

Rossi recalcó que se ha vuelto un hombre de confianza y consulta del mandatario argentino. Por ello, sobre los rumores que lo vinculan como uno de los protagonistas en el regreso como ministro del gobierno nacional, Rossi remarcó: "Los cambios en el Gabinete los conoce solamente Alberto Fernández".

"Es el Presidente el que decide y evalúa cada movimiento de su equipo de colaboradores", subrayó.

"Charlo seguido con el Presidente y por una cuestión de prudencia no hablo", añadió.

Consensuar o confrontar: cómo atacar la inflación

En Página/12, el periodista económico Alfredo Zaiat sintetiza que la clave del conflicto entre Cristina y Alberto radica en que el fuerte crecimiento económico no fue acompañado de distribución de ingresos progresiva. 

Y que para avanzar en una síntesis de crecimiento con distribución económica, desde el kirchnerismo liderado por Cristina se busca la confrontación de intereses y desde el albertismo el diálogo y consenso. 

Sobre las diferencias sustanciales sobre cómo enfrentar el espiral inflacionario, Rossi sostuvo que "estamos en el eterno dilema del vaso medio lleno o el vaso medio vacío".

"Es una política que ha mostrado niveles altos de crecimiento económico, con baja de la pobreza, indigencia y desempleo", destacó y agregó: "Con una buena recaudación fiscal, por encima de la inflación".

Además, subrayó que el acuerdo con el FMI estabilizó la macroeconomía y las expectativas devaluatorias, acortando la brecha entre el dólar oficial y el blue.

"El problema de precios, sin dudas, está generado a partir de una actitud especulativa", evaluó. 

"Hay que controlarlo con consenso o sin consenso, con las herramientas de Estado, porque tenemos un problema de ingresos en el sector informal de la economía", explicó.