El Ministerio de Salud de Tucumán confirmó esta sábado por la mañana la muerte de un nuevo paciente que sufrió neumonía bilateral, producto de una enfermedad que aún no fue identificada. Con este fallecimiento, ya son cuatro los decesos.

“Se trata de un paciente del sexo masculino de 48 años de edad, con comorbilidades, que se encontraba internado en grave estado en el sector público”, comunicó la cartera sanitaria. 

Hasta el momento, se confirmaron 11 contagios con nexo en el mismo Sanatorio Luz Médica, epicentro del brote de neumonía que preocupa a la provincia y al país, y que también está siendo monitoreado por la Organización Mundial de la Salud (OMS).

En tanto, las muestras tomadas a los pacientes que fueron enviadas a Buenos Aires para ser estudiadas en el Instituto Malbrán, indican que se trata de legionella, según publica La Gaceta.

La Legionella es una bacteria que se propaga en los sistemas de agua artificiales de los edificios. Foto Shutterstock.
La Legionella es una bacteria que se propaga en los sistemas de agua artificiales de los edificios. Foto Shutterstock.

Qué es la legionella y cómo se contagia

El Instituto Malbrán explicó en un comunicado que la legionella es una bacteria que provoca la legionelosis, una forma de neumonía potencialmente mortal que se contrae a través de la inhalación de aerosoles o gotas de agua contaminada con concentraciones elevadas de la bacteria.

Allí también se aclara en nuestro país es una enfermedad probablemente sub-diagnósticada, "debido a que la confirmación de un caso de legionelosis puede representar un desafío diagnóstico".

Esto ocurre porque, al ser una enfermedad infrecuente, muchos laboratorios de centros de salud no cuentan con la metodología para el diagnóstico.

Según los datos preliminares, la legionelosis sería la enfermedad que causó las cuatro muertes y los once casos, de los cuales al menos cinco de estos pacientes permanecen internados, la mayoría, en grave estado y con asistencia respiratoria mecánica.

Todos estos cuadros tenían como nexo sanitario con el Sanatorio Luz Médica de la capital tucumana, ya que eran médicos, enfermeros o pacientes de esa clínica, advirtieron en el Ministerio de Salud Pública. De todos modos, resta determinar cómo fue la vía de contagio. Las principales posibilidades apuntan al agua o al aire como agentes de transmisión.

La legionelosis puede contagiarse por vía aérea, mediante la inhalación de aerosoles contaminados con la bacteria. La infección también puede producirse por aspiración de agua o hielo contaminados, sobre todo en pacientes hospitalizados vulnerables, o por exposición del recién nacido durante los partos en el agua. No hay transmisión directa de persona a persona, señalan en la web de la Organización Mundial de la Salud.

Las personas pueden contraer la enfermedad del legionario o la fiebre de Pontiac inhalando las gotitas que contienen las bacterias. Foto Shutterstock.
Las personas pueden contraer la enfermedad del legionario o la fiebre de Pontiac inhalando las gotitas que contienen las bacterias. Foto Shutterstock.

Existen infecciones que presentan síntomas similares a una pulmonía: con tos, escalofríos, dolor de cabeza, sensación de decaimiento y fiebre alta.También pueden aparecer episodios de diarrea o de confusión. En esos casos suele tratarse de la enfermedad del legionario o una neumonía por legionella.

Si no se trata el cuadro o si recibe un mal tratamiento, puede tener complicaciones. En cambio, la aplicación del tratamiento adecuado hace que las perspectivas sean bastante buenas.

La fiebre de Pontiac también puede ser causada por legionellas y manifestarse con síntomas similares a una gripe: fiebre, desgano, dolor de cabeza y de extremidades. No va acompañada de una pulmonía. Se trata de una enfermedad que suele curarse sola.

Qué recaudos hay que tomar para prevenir la legionella

Cuando uno se va de casa y regresa bastante tiempo después, es fundamental abrir todas las canillas ni bien uno ingresa al hogar y no beber ni un sorbo, ni ducharse hasta que el agua no haya corrido durante un buen tiempo. Eso evitará que alguien ingiera bacterias que podrían haberse reproducido rápidamente en las cañerías durante la ausencia de los habitantes.

Las legionellas se reproducen a temperaturas de entre 25 y 55 grados Celsius en el agua estancada. Si se trata de una instalación muy afectada, cualquiera puede infectarse con solo ducharse o higienizarse con una canilla de agua.

Fuentes: La Gaceta; Clarín