Brenda Uliarte, detenida por el intento de asesinato contra la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner, declaró este martes haber escuchado que el diputado del PRO Gerardo Milman, mano derecha de Patricia Bullrich en el ministerio de Seguridad, le "pagaba a varias personas" a cambio de participar en manifestaciones con el fin de "generar disturbios y violencia" en cercanías de la casa de la exmandataria, en el barrio porteño de Recoleta. 

Uliarte también vinculó en su declaración a Sabag Montiel con el legislador y con la agrupación Revolución Federal, de la que se investiga su funcionamiento en una causa paralela.

"Yo nunca vi a Milman pero decían que le pagaba a varias personas para que participaran en manifestaciones y con ello generar disturbios y violencia alrededor de la residencia de Cristina Kirchner" Brenda Uliarte

VER: El celular de Milman: Diputados autorizó a la jueza a investigar el dispositivo

Sabag Montiel, principal acusado por el intento de magnicidio. Foto: Leo Vaca / Télam.
Sabag Montiel, principal acusado por el intento de magnicidio. Foto: Leo Vaca / Télam.

"Yo no sé por qué Nando (Fernando Sabag Montiel, su pareja en ese momento) hizo esto, pero sí sé que él no es capaz de organizar y hacer todo esto solo, claramente alguien está atrás. Yo nunca vi a Milman pero decían que le pagaba a varias personas para que participaran en manifestaciones y con ello generar disturbios y violencia alrededor de la residencia de Cristina Kirchner", expresó la detenida, procesada como coautora del intento de magnicidio.

"A ver, yo no digo que financiaron el atentado pero sí financiaban para agitar y armar quilombo. Y Carrizo (Nicolás, también detenido, “jefe” de Uliarte y Sabag Montiel en la venta de los célebres copitos de nieve) sabe todo eso, pero él va a cubrir a Nando, porque no quiere tener quilombos con los de arriba, saben que hay pesos pesados", declaró la imputada en el escrito que fue certificado por un jefe de turno del servicio penitenciario federal de Ezeiza.

Revolución Federal

"Yo fui un solo día a la sede de Revolución Federal a vender copitos, que me llevó Fernando. Él era parte de todo, no yo. De hecho, si le preguntan a los miembros de Revolución Federal nadie me conoce; o si me vieron, fue alguna vez vendiendo copitos en algún acto, no porque interese el acto en sí, porque se vendía re bien", se desligó Uliarte, como parte de su estrategia de defensa.

Los hechos vinculados a Revolución Federal se investigan en una causa judicial diferenciada que tienen el juez federal Marcelo Martínez de Giorgi y el fiscal Gerardo Pollicita, quienes describieron una cronología de actos de violencia que se suscitaron antes del atentado y pudieron haber generado el escenario para que alguien intentara finalmente cometerlo.

Uliarte dijo vivir "un infierno" por lo que hizo Sabag Montiel y "sus decisiones" y buscó distanciarse del intento de atentado: llegó a decir que aquel 1 de septiembre acompañó a Montiel porque él la había amenazado.

"El día que pasó... todo ese día Nando estuvo raro, era jueves, estaba estudiando y estaba haciendo UBA XXI Medicina, el CBC; cuando me mostró el arma yo al principio pensé que era una réplica; ese día Fernando me apuntó con el arma y me decía 'ahora si quiero te mato'", sostuvo.

Uliarte aseguró que creyó que no era verdad que Sabag planeaba matar a la vicepresidenta y especuló con que el arma era "una réplica o no funcionaba".

Por su parte, Milman es investigado tras la declaración de un testigo que ubicó al diputado, dos días antes del intento de asesinato, en un bar cercano al Congreso Nacional y al que le atribuyó haber dicho la frase "cuando la maten, voy a estar camino a la Costa". Ese tramo del expediente está todavía en manos de la jueza federal María Eugenia Capuchetti y el fiscal Carlos Rívolo.